Es un tipo de corriente terapéutica, de baja frecuencia (1-250 hz), de sensaciones agradables durante su aplicación, que mediante una estimulación trans-cutánea (a través de la piel) consigue bloquear la transmisión del dolor en la zona de aplicación local, mediante el mecanismo del "Gate Control" (bloqueo de la puerta de entrada) descubierto por Melzack y Wall en la década de los 70.
Melzack y Wall descubrieron que la estimulación trans-cutánea de fibras A inhiben las fibras C y con ello la transmisión del dolor en el asta posterior medular.
Mediante el descubrimiento de este mecanismo de inhibición del dolor, se idearon y empezaron a fabricar electro-estimuladores que disponían de este tipo de corriente analgésica.
Afortunadamente, durante 3 décadas, la tecnología ha avanzado y los equipos originales de sobremesa (grandes,pesados y poco manejables) han dado paso a electro-estimuladores pequeños y portátiles, ideados para realizar tratamientos de Fisioterapia en el domicilio de aquellos pacientes que, por cualquier causa, no pueden acudir a las clínicas y centros de Fisioterapia.
La programación de estos equipos para obtener un efecto de inhibición del dolor es simple. Se han realizado multitud de estudios de investigación acerca del uso del TENS para el dolor, y se ha llegado a un consenso a la hora de programar dichos equipos.
La amplitud de onda debe ser como mínimo de 250 microSeg, ya que así se obtiene una mayor inhibición de la actividad neuronal en el asta posterior medular. La frecuencia debe oscilar entre los 80 y los 120 Hz para obtener un efecto analgésico adecuado.
La colocación de los electrodos también es muy importante siendo el cátodo (polo - ) el electrodo activo, y que tendrá que ubicarse en el punto o área de máximo dolor. El ánodo (polo +) se ubicará proximal al cátodo.
Los equipos TENS portátiles tienen un coste medio aproximadamente entre 70 y 120 €, por lo que se trata de una alternativa terapéutica económica frente al uso abusivo de fármacos, que a largo plazo, ocasionan muchos efectos secundarios en el organismo y un mayor coste económico.
Las corrientes TENS no tienen efectos secundarios, no provocan intoxicación por sobre-dosificación como los fármacos y puede ser utilizada por el propio paciente previo adiestramiento por parte del Fisioterapeuta.
Por lo tanto, un tratamiento terapéutico para el DOLOR económico, sano y eficaz.
Consulte a su Fisioterapeuta de confianza para mayor información.